"Quien acepta el mal en forma pasiva, está tan comprometido con él como quien contribuye a perpetrarlo. Quien acepta el mal sin protestar contra él, en realidad está colaborando con él."

Martin Luther King


Ciudad de Bahía Blanca, intersección de las calles Saavedra y Villarino, 28 de agosto de 2002, casi las nueve de la noche, nuestro padre, Felipe Glasman, es asesinado.

(leer carta completa...)

***1 ENTRADA NUEVA***

26-10-2010

miércoles, 29 de octubre de 2008

Escrito presentado ante el juzgado de garantías

SOLICITA FIJACIÓN Y REALIZACIÓN DE AUDIENCIA


Sra. Jueza:

Alberto BOVINO, abogado, tº XXX, fº 436, del Colegio de Abogados de San Isidro, monotributista, CUIT 20-13188055-4, apoderado de los particulares damnificados Sra. Laura Rosana GLASMAN y Sr. Eduardo GLASMAN, IPP 49.814, manteniendo el domicilio constituido en Palau 22 de esta ciudad, a la Sra. Jueza digo:

I. OBJETO

En nuestra última presentación, habíamos solicitado se fijara fecha de audiencia para dar trámite y resolver acerca de la recusación del fiscal LONG para el 19 de septiembre de 2008. Con fecha 18 de septiembre, la Sra. Jueza resolvió rechazar nuestra solicitud por estar de turno y, además, actuando como subrogante de los Juzgados de Garantía Nº 1y Nº 2.

En esta oportunidad reiteramos nuestro pedido a la Sra. Jueza, para que cuanto antes fije fecha de audiencia para terminar con el trámite de este incidente.

II. FUNDAMENTOS DE LA SOLICITUD

II. 1. Fundamentos normativos

El régimen establecido legalmente en el CPP Buenos Aires es claro en cuanto a la brevedad del trámite que debe darse a una recusación:

ARTICULO 51.- Trámite.- La recusación solo podrá ser interpuesta, bajo sanción de inadmisibilidad, en las siguientes oportunidades:

1) Durante la investigación penal preparatoria, antes de su clausura.

2) En el juicio, durante el plazo de citación.

3) Cuando se trate de recursos, en el primer escrito que se presente o al término del emplazamiento.

En caso de causal sobreviniente o de ulterior integración del Tribunal, la recusación podrá interponerse dentro de las cuarenta y ocho (48) horas de producida o de ser aquella notificada, respectivamente.

Si se admitiere la recusación se procederá con arreglo a lo dispuesto en el artículo 49. En caso contrario, se remitirá el escrito de recusación con su informe al órgano competente quien, previa audiencia en que se recibirá la prueba e informarán las partes, resolverá el incidente dentro de las cuarenta y ocho (48) horas.

ARTICULO 54.- Excusación y recusación de Fiscales.- Los miembros del Ministerio Público Fiscal deberán excusarse y podrán ser recusados por los mismos motivos establecidos respecto de los Jueces, con excepción de los previstos en la primera parte del inciso 8 y en el inciso 10 del artículo 47.

La recusación y la excusación serán resueltas en juicio oral y sumario por el órgano ante el cual actúa el funcionario.

II. 2. Necesidad y urgencia de la medida

Independientemente de la regulación legal del instituto de la recusación, existen circunstancias apremiantes que tornan indispensable que la Sra. Jueza —que, aun si ya no fuera subrogante en este Juzgado, debe continuar interviniendo en el trámite, por el principio de identidad física del juzgador que rige en las audiencias orales como exigencia del principio de inmediación— disponga y realice de manera urgente la audiencia que permita poner fin a este incidente.

En efecto, el fiscal LONG, luego de dictada la sentencia condenatoria de Vicente COLMAN —en la cual se dice que no aportó un solo elemento de prueba sobre la agravante de precio o promesa remuneratoria, y que su acusación, en este punto, se funda sólo en su voluntarismo—, se ha autoproclamado el gran ganador —como si en una causa penal alguien ganara algo—, y ha aumentado sus arremetidas contra los Sres. Laura, Sara y Eduardo GLASMAN.

Lo que es más grave aún, ha amenazado, literalmente, con someternos a investigación, y así lo dijo en un programa radial. No deseamos agregar nuevos hechos a este incidente para no prolongar más este trámite, pero proporcionar esta información tiene como fin exclusivo explicar a la Sra. Jueza la necesidad de resolver este incidente de manera inmediata, pues de ello depende, entre otras cuestiones, si se hará una investigación o, por el contrario, algún día deberemos asistir a un nuevo juicio en el cual el fiscal LONG solicite que se condene a quien él considere autor intelectual sólo porque así lo cree él.

Finalmente, deseamos aclarar que comprendemos la inequitativa asignación de carga de trabajo que se le ha asignado, pero le solicitamos que también comprenda la angustia que están viviendo los hijos del Dr. Felipe GLASMAN, y el peligro que genera para la investigación la continuidad del Agente Fiscal Christian LONG.

III. PETITORIO

Por las razones expuestas, a la Sra. Jueza solicitamos:

1. Fije fecha de audiencia oral y pública para tramitar la producción de la prueba ofrecida y oportunamente aceptada en el menor tiempo posible;

2. Realice la audiencia y, una vez concluida, disponga el apartamiento del Agente Fiscal Christian Long de esta investigación.

Proveer de conformidad,
que es derecho.

Alberto BOVINO

lunes, 27 de octubre de 2008

Entrevista a Laura Glasman - Oct 23

Entrevista a Laura en Frente a Cano

jueves, 23 de octubre de 2008

Yo me pregunto (otra vez)...

El martes 21 de octubre de 2008, La Nueva Provincia publicó un diálogo en el que el abogado Asad afirma, y Beatriz Sosnitsky repite, que Beatriz no conoce a su nieto porque no se le deja conocerlo. Asad también afirma que Laura y Eduardo Glasman debemos “arrepentirnos” para que “el corazón de la madre se abra como se debe.”

No es la primera vez que Asad hace comentarios públicos sobre nuestra vida privada, ni es la primera vez que Beatriz Sosnitsky repite lo que dice Asad.

Nos preguntamos: ¿Por qué Asad hace interviene con respecto a nuestra vida privada? ¿Quién dijo que, repitiendo lo que dice Asad, encontrarán al asesino de Felipe Glasman?

Asad acota que nos debemos arrepentir. Nos preguntamos, ¿de qué nos tenemos que arrepentir? ¿De no hacer o repetir lo que Asad dice?, ¿De no prestar falso testimonio?. ¿Nos tenemos que arrepentir de no admirar al coronel Seineldín?, ¿de no defender a quienes dejaron huir a un represor de la dictadura militar?, ¿de no defender a un policía que asesinó a un chico?, ¿de no negar la violación de una nena embarazada?. ¿Nos tenemos que arrepentir de no atacar a otros con mentiras?.

Nos preguntamos ¿Nos perdonarán si elogiamos a Seineldín? ¿Si defendemos a policías que permiten la fuga de represores o que matan chicos? ¿Y si acusamos a Carignano y a Ochoa sin pruebas?

¿O tal vez nos perdonarán si dejamos que el fiscal mienta a la opinión pública, si aceptamos que use el asesinato de nuestro padre para atacar a otros, o si no cuestionamos sus acciones como funcionario público?

Nos preguntamos ¿Podremos re-unir a nuestra familia si nos convertimos en enemigos de todo lo que pensaba Felipe Glasman?

Estamos hartos de que los que nos acusan e insultan porque no traicionamos las ideas de nuestro padre.

Laura Glasman y Eduardo Glasman

Sobre el tiempo y el espacio

Al parecer, el fiscal Long no solo tiene problemas con fantasmas, sino también con el continuo espacio-tiempo...

En declaraciones a La Nueva Provincia, él dijo:

"Es cierto, pero no hay peor mentira que parte de la verdad. Las representaciones encabezadas por los Dres. Silvestroni y Bovino nada aportaron como prueba en búsqueda del esclarecimiento del crimen."

"Sobre el tema, fueron estructurando una suerte de discurso camaleónico; en primer lugar, con el silencio sobre la situación de Vidal. Así, siempre se supo que Colman viajó junto a Vidal, siendo detenido el primero en Banfield, el día 13 de septiembre de 2006 y, sobre Vidal, esas representaciones no dijeron palabra durante más de ocho meses, hasta que la Fiscalía decidiera solicitar su detención, con fecha
15 de mayo de 2007,
por entenderlo sospechado de algún grado de participación."

"Y no sólo que, durante ese lapso, no pidieron la detención de Vidal, sino que, además, existen elementos probatorios (como la declaración del propio Vidal y su mujer, Ghersinich) que indican, en aquel momento, ciertas relaciones e intercambio de información entre la defensa de Colman y allegados a la Asociación Médica. "

Si bien es cierto que ni el Dr Bovino o el Dr. Silvestroni no pidieron la detencion de Vidal entre el 13 de septiembre de 2006 y el 15 de mayo de 2007, poco pudieron haber hecho al respecto dado que no fueron contratados sino hasta después de Junio de 2007!

Una más y van...

miércoles, 22 de octubre de 2008

Apropiarse de la derrota

Por Jorge Jinkis

Hay que saber perder, se dice, y eso significa, entre otras cosas, respetar las reglas del juego cuando el resultado es la derrota. Hay algo menos fácil todavía: hay que saber qué significa perder y qué se pierde cuando ya no se trata de un juego.

La cara de satisfacción que encuentro en el resentimiento desconcertado de Beatriz Sostnisky, en la grosería destemplada de Asad, en el ensoberbecimiento mediocre de la actuación de Long y de algunos pequeños miembros del coro, me recuerda el regreso de Suecia después de la goleada, presentándose sin vergüenza como ¡campeones morales!

Pasaron 6 años de un crimen mafioso realizado por un sicario, y se celebra un fallo por homicidio simple cuya finalidad es cepillar algunos nombres para que queden lustrosos en próximas elecciones y olvidar el marco político corrupto que programó un asesinato trágico para la polis.

Escribo esto para decir que nadie se confunda, que somos los dueños exclusivos de la derrota, que no se la cedemos a nadie; la derrota es de la familia de Felipe Glasman, de sus amigos del alma, de los nuestros, de la infinidad de personas que con generosidad solidaria hicieron suya esta causa alentando que se realizara una investigación seria que pudiera aproximarse a la verdad de lo sucedido.

Hemos fracasado en este intento. Aunque no nos detendremos aquí, es imprescindible decir que este fallo es una derrota que nos duele. Debemos reconocer que hoy la verdad circula por las cloacas de la ciudad. Es doloroso decirlo, pero es imprescindible decirlo para que la justicia y la verdad, puedan alguna vez volver a correr por aguas más limpias, desenredadas de las impericias programadas lejos de toda espontaneidad inadvertida.

martes, 21 de octubre de 2008

Condena y horizonte negro

Publicado en Página 12. 21.10.2008

En fallo dividido, los jueces consideraron a Vicente Colman culpable de homicidio simple, pero no encontraron pruebas de un crimen por encargo. El fiscal Cristian Long y la viuda estaban muy conformes. El resto de la familia pidió el apartamiento del fiscal.

El fallo en Bahía Blanca funcionó como un golpe altisonante en un tambor desafinado. Hizo ruido, pero no se sabía bien hacia dónde iba el estruendo. El caso Glasman, el del médico asesinado por denunciar los negociados del sector Salud bahiense, tuvo ayer su primera sentencia después de seis años de perpetrado el crimen; sentencia elevada, pero no meritoria. Vicente Colman, carnicero y ex marino de la ESMA, fue condenado en fallo dividido a 27 años de prisión por el homicidio simple de Glasman, con el agravante del uso de arma de fuego, aunque la ausencia de pruebas presentadas por el fiscal Cristian Long impidió que Colman fuera condenado como sicario, o sea, haber cobrado para asesinar al médico. Y si cobró es porque alguien estaba interesado en que ocurriera. En ese punto se abren las tremendas grietas que presenta el caso, entre ellas el pedido de recusación que el propio fiscal recibió de parte de los hijos de Glasman. “Pedimos su apartamiento hace varios meses. Nunca nos dio acceso a las pruebas. Con él, el horizonte de la investigación no es oscuro, es negro”, dijo a PáginaI12 Alberto Bovino, abogado de los hijos de Glasman.

El Tribunal en lo Criminal (TOC) 1 de Bahía Blanca, integrado por los jueces Enrique Montironi, Mario Burgos y José Luis Ares, condenó a Vicente “Tito” Colman (51) a 27 años por “homicidio simple”, con el agravante de haber sido cometido con el uso de un arma de fuego.

La noche del 28 de agosto de 2002, Felipe Glasman, entonces presidente de la Asociación Médica de Bahía Blanca, salió de su consultorio en la calle Saavedra 335 de esa ciudad en dirección a su Renault 11, que había dejado estacionado a cuadra y media de allí. Al llegar a la calle Villarino, se le acercó un hombre (que luego se determinó que se trataba de Colman), le dirigió unas palabras en buen tono como para no alarmarlo, y luego le disparó una vez en el pecho y, con la víctima ya en el piso, lo remató de otro balazo en la cabeza. Glasman llevaba 1600 pesos y un maletín con documentación. Los 1600 pesos quedaron intactos, y le robaron el maletín, con lo que los investigadores descartaron el asesinato con intención de robo.

Las denuncias de los familiares apuntaron rápidamente al crimen por encargo, a los intereses del negocio de la salud y funcionarios corruptos que Glasman atacaba con sus denuncias. Pero las investigaciones del fiscal Cristian Long fueron perdiendo impacto y, al mismo tiempo, provocando divisiones importantes del lado de la querella. A tal punto que los hijos de Glasman, Laura y Eduardo, se apartaron de su madre, Beatriz Sosnitsky, como querellantes, en absoluto desacuerdo con la línea de investigación (o de desinvestigación) que llevaba Long, con quien acordaban Sosnitsky y los representantes de la Asociación de Médicos.

“Long perdió testigos, parecía que defendía a un grupo en lugar de acusar, dijo que continuó adelante con el caso por ‘afecto a la viuda’, y no puede decir eso. Si es un fiscal no tiene que hacer falta que tenga afecto con nadie para avanzar con el caso –dijo a este diario Jorge Jinkis, cuñado de Glasman–. Nosotros de ningún modo podemos seguir adelante si la investigación está en manos de Long.”

En el tribunal hubo diferencia de criterio. Mientras que los jueces Ares y Burgos consideraron que no se habían encontrado pruebas de que se tratara de un crimen por encargo y dieron por probado el “homicidio simple en los términos del artículo 79 del Código Penal con el agravante previsto en el artículo 41 bis según la Ley 25297por haberse empleado en el hecho un arma de fuego”, el juez Enrique Montironi consideró que había pruebas suficientes para condenarlo por homicidio por encargo, tal como había pedido el fiscal Long. “No consiguió una sola prueba del homicidio por encargo –dijo Bovino–. Nosotros podremos investigar en ese sentido, pero no podemos estar acusando ante el periodismo a personas y después resulta que no tenía pruebas para sostener la acusación.”

La perspectiva de la fiscalía parece planear sobre otro mapa. “Esto es un primer paso para conocer la verdad y ahora viene todo el resto de la parte que no estamos muy lejos de conocer, ya que queremos saber qué es lo que sucedió con el autor intelectual”, afirmó Long al término del juicio. “Haber llegado hasta aquí es un paso muy importante, porque hubo obstáculos y recusaciones”, aseguró Long.

Beatriz Sosnitsky, viuda de Glasman, dijo que “creo que va a terminar bien y se va a saber quién lo mandó a matar. No va a pasar mucho tiempo para que lo sepamos”, en diálogo con radios de Bahía Blanca. El optimismo no era compartido por sus hijos, Laura y Eduardo, ni por Jorge Jinkis y Sara Glasman, cuñado y hermana de la víctima.

domingo, 19 de octubre de 2008

Carta abierta a los Sres. Long, Asad y a su prensa aliada

Por Laurie Glasman

Durante seis años he callado mientras soy testigo de una tragedia familiar. Ya no puedo callar. No puedo callar porque les tengo que dar una voz a mis hijos, víctimas inocentes de esta tragedia.

Recuerdo con gran dolor una noche en Londres despertar a las 2 de la mañana porque sonaba el teléfono de Eduardo. Recuerdo a Eduardo contestar la llamada, sentado en la cama y ponerse pálido. Nunca lo había visto así. Recuerdo los gritos de Laura por el teléfono, “¡Mataron a Papá!”, “¡Lo mataron!”, “¡Mataron a Papá!”. Recuerdo la cara de Eduardo, su incredulidad y horror. Ése fue el momento, a las 2:00 AM hora de Londres, cuando cambió el curso de nuestras vidas.

Ahora, seis años después, no sólo un asesino le arrebató su abuelo a mis hijos, sino que mis hijos han perdido a su abuela; hemos perdido la posibilidad de compartir con nuestros hijos los viajes que solíamos hacer a Bahía Blanca, y, más que nada, les hemos heredado a nuestros hijos, a los nietos de Felipe, una historia de asesinato, mentiras y ataques.

Felipe siempre me dijo que quería nietos. Yo tenía cuatro meses de embarazo cuando lo mataron. Es irónico que uno de sus últimos pensamientos fuera que iba a ser abuelo. Fue muy triste entrar a su consultorio de la calle Saavedra y encontrarnos con una foto del ultrasonido de su nieta. Lo es aún más cuando su nieta nos pregunta: “¿Dónde está el abuelo Felipe?”, “¿Lo vamos a ver cuando nos subamos al avión, porque está en el cielo?”. ¿Cuál va a ser nuestra respuesta cuando nos pregunte por qué lo asesinaron? Sr. Long, ¿me puede usted dar esa respuesta?

Sr. Long, en una de las últimas conversaciones que tuvo con Eduardo, dijo que a la única que le importaba la muerte de Felipe era a Betty. ¿No le parece que en esta familia hay más víctimas? ¿Usted realmente cree que no nos importa a Eduardo, a Laura, a mis hijos y a mí?

Sr. Asad y Sres. Periodistas, ¿cuál es su motivación para atacar a nuestra familia?

Sres. Periodistas, ¿ganan ustedes más dinero si publican falsedades y convierten una tragedia familiar en una telenovela?

Sr. Asad, ¿gana usted más prestigio atacando a nuestros abogados e instigando a que una viuda declare hechos que no son reales?

Yo me pregunto todos los días ¿qué ganan ustedes con todo esto? ¿Qué o quiénes los impulsan? ¿Por qué creen necesario difamar públicamente al padre y a la tía de mis hijos? ¿Por qué, señores, mienten sobre Eduardo y Laura Glasman en sus declaraciones y notas en la prensa? ¿No creen que es suficiente que lo hayan matado a Felipe?

Algún día, espero, se conocerá la verdad. Algún día espero poder, con mi familia, terminar el duelo por Felipe.

Sr. Long, Sr. Asad, Sres. Periodistas, ¿les queda claro que aquí hay más víctimas?

Laurie Glasman

viernes, 17 de octubre de 2008

Antes de la sentencia

Las declaraciones de Long aparecidas el 15/10 en La Nueva Provincia son indignantes. Allí nos enteramos que le dio la mano al defensor de Colman. Pero no fue una muestra de civilidad; la mano que le dio fue una acumulación de impericias.

Los familiares de Felipe Glasman nos negamos a ir a un juicio donde quien debe representar el interés de la victima tiene a sus familiares como enemigos y no se interesa por la verdad. A pesar de ello, los abogados de Laura y Eduardo trataron de apuntalar la presentación endeble del fiscal como pudieron.

El fiscal afirma que quería llegar al juicio por afecto a Betty Sosnitsky. No se demuestra afecto empujando a alguien a cometer falso testimonio.

Es inadmisible que el Fiscal diga que quería llegar al juicio por afecto a una persona; es su deber. Su "amor" resulta funcional a ciertos grupos. La persona que hace de fiscal puede querer y odiar como le parezca, pero el funcionario tiene la obligación de investigar para llegar a la verdad y obtener justicia, y no armar al voleo algunas cosas para sacarse el fardo de encima.

Insulta a Bovino diciendo que es un borracho, a Silvestroni diciendo que es un cínico y acusa a los hijos de Felipe Glasman de vacilaciones éticas. No necesita ser un “indiecito” para bajarse del caballo, alcanza con que sea responsable.

Nadie está interesado en una venganza. Si el señor Colman es el autor material del crimen, cualquier sentencia que no sea asesinato por encargo falta a la verdad y a la justicia. Y la responsabilidad determinante será de Long.


Sara Glasman y Jorge Jinkis

domingo, 5 de octubre de 2008

Crónica de un sainete inadmisible

Por Sara Glasman

Cómo podríamos, los familiares de la víctima, aceptar que la tragedia se vea convertida en una parodia del peor de los sainetes? (género popular argentino que merece nuestro respeto aunque está fuera de lugar aquí, en la sala de un tribunal donde se desarrolla el juicio oral al presunto ejecutor de un crimen mafioso). Esta es pues la escena.

Los personajes:

1) El fiscal Christian Long. Antes del comienzo del juicio, Héctor Gay, periodista de la radio local, leyó un escrito donde su elogio a la actividad del fiscal se mide por el grosor de la causa, una enorme cantidad de fojas iniciadas antes por otras fiscales y sus respectivos investigadores. El mismo periodista, ante el rechazo del tribunal de la declaración del imputado Vidal en calidad de testigo, se manifiesta sorprendido por la complicación de un código de procedimientos que parece entorpecer la labor del fiscal. Pero ese código es aquél que todo fiscal debe conocer y sus reglas son aquellas que cualquier jurista debe acatar. De modo que el problema no está en el Código, sino en aquél que se esmera en desconocerlo. Fue Long quien causó la imposibilidad del testimonio de Vidal, por no atenerse a las reglas, a pesar de las advertencias de las que fue objeto. El fiscal actúa guiado más por el objetivo de defender a “importantes personajes de la vida bahiense” (como los nombra) que en su función de acusar al presunto ejecutor. Tanto, que comienza su interrogatorio a un jefe de investigaciones preguntando si había encontrado alguna prueba de participación en la autoría intelectual por parte de Linares, Mena, Larraburu, Vidili o Sánchez.

2) El jefe de la UICO, de nombre Carballo, especialista en la investigación de delitos complejos, como la denominación de su agrupación lo anuncia, supone “por descarte” que el crimen fue por recompensa remuneratoria, y presume la autoría intelectual de amigos de Felipe “porque la viuda se lo dijo”. En esta ocasión no aclara si halló o no conexión entre los no tan importantes personajes y el presunto ejecutor.

3) El abogado de la viuda, Miguel Angel Asad, es el primero y único que afirma que a Felipe lo mataron porque quería “socializar la medicina”. Su ideología empobrece su imaginación: escucha la palabra obra “social” y ese término le evoca al Che Guevara. Si así fuera, tendría como enemigos desde Barrionuevo y Nosiglia, pasando por todos los sindicatos, las prepagas, y hasta el médico harto de cobrar un sueldo magro trabajando en un hospital recóndito sin disponer de los insumos necesarios. Motivar el crimen en la disminución de los sueldos de Ochoa y Carignano hace descender la dignidad de Antígona a la chabacanería de cualquier cholula de barrio. El currículum del inefable Asad es visitable por Internet; uno se entera que defiende a quienes son sospechados de cómplices en la fuga de un represor de la dictadura militar en Bahía Blanca. Este hombre, ubicado en las antípodas ideológicas, políticas y éticas de mi hermano, ¿puede estar interesado en las razones por las que mataron a Felipe?

4) La viuda, después de acusar públicamente a los “personajes importantes”, aparece ahora diciendo lo que Long y la UICO quieren: que quien habría mandado matar a Felipe sería un amigo que lo traicionó. Afirma que ella pidió el pasaje a la Unidad Funcional de Long, como si no fuera la AMBB quien lo hizo. Somos demasiados los testigos que la escuchamos acusar a Linares, Mena, Sanchez, Larraburu, etc, habiendo incluso publicado una carta en La Nueva Provincia en respuesta a afirmaciones de Larraburu sobre Felipe. Agrega que dos devotos amigos de Felipe como Palacios y Partnoy habrían “vaciado” una computadora que tan vacía no estaba, y encima incluye al doctor Vecchi en presuntas afirmaciones acerca de que habrían llevado el cuerpo de Felipe primero a una ¡Maternidad!? Para después, frente a la indignación de Vecchi quien la increpó, decir que tal vez se habría equivocado. Repite que lo mataron porque quería socializar la medicina –afirmación que primero había hecho Asad- y niega al mismo tiempo que le hayan indicado lo que tenía que declarar.

5) El diario digital La Brújula. Es la manifestación paradigmática del síntoma que llamamos sainete, llevada a sus extremos más obscenos. Aparecen presuntos comentaristas –no sabemos si son varios o el mismo con distintos alias- que adoptan motes pretendidamente ingeniosos, pero ridículos y patéticos, como “neumonólogo Edgar Gajo”, “urólogo Aquiles Meo”, “proctólogo Matías Queroso”. Se dedican principalmente a elogiar a Long y a denostar e insultar a los hijos y a sus abogados, a la AMBB y en muchas oportunidades a Felipe mismo. Constituyen ese tipo de cortejo fúnebre que nadie invitó pero acuden en manada de cuervos a comer empanadas y contar chistes malos. Un diario digital se convierte en un programa de chimentos.

Así ha comenzado el juicio que tanto hemos esperado. Ya hay quienes, en Bahía, dudan de la condena de Colman. Esperemos que algo o alguien reconozca el estatuto trágico y político del crimen que nos afecta, no sólo como familiares, sino también como ciudadanos.

viernes, 3 de octubre de 2008

Se va la primera...

Ayer el el tribunal a cargo del juicio al presunto autor material del asesinato de Felipe Glasman rechazó la incorporación por lectura de la declaración indagatoria de Javier Vidal, quien acompañó al imputado en el momento del crimen y cuyos dichos lo incriminan seriamente.

Hace unos meses, Christian Long, el fiscal a cargo de la causa, archivó la causa de Vidal encerrándose en argumentos circulares e intuiciones carentes de todo elemento objetivo de convicción, y a pesar de las reiteradas protestas de los damnificados. Cuando dos particulares damnificados solicitamos que se eleve a juicio la causa contra Vidal, Long, faltando a la verdad y con mala fe, afirmó a la prensa que la única finalidad que teníamos quienes solicitábamos el enjuiciamiento de Vidal era neutralizarlo como testigo.

Ayer el tribunal demostró no sólo la mala fe sino la incompetencia de Long, y de su superior el fiscal general Fernández. Si Vidal, como correspondía, hubiera sido llevado a juicio, su declaración indagatoria habría ingresado al debate sin discusión alguna (art. 366, inc. 1).

El único (i)responsable de la imposibilidad de utilizar la información aportada por Vidal al proceso es el fiscal Christian Long.




En otro orden de cosas, resulta vergonzante el testimonio de Walter Carballo, a cargo de una unidad de investigaciones complejas, quien después de años de “investigación” y de negar acceso a la misma a los damnificados, usa como soporte de una hipótesis de asesinato por encargo la opinión de la viuda acerca de un supuesto alejamiento personal de Felipe, y además responde en forma ininteligible al pedido de explicaciones sobre las líneas de investigación abandonadas por el fiscal Long.

¿Estos son los grandes avances de la investigación que nos fueron ocultados por más de un año?